El casco urbano presenta diversas muestras de arquitectura popular. Las viviendas forman pequeñas manzanas, son poco voluminosas y construidas con piedra, tapial y en menos medida ladrillo, destacando enormes portadas con arco de medio punto. La localidad tiene un trazado urbano en terreno llano, con predominio de una amplia plaza. La arquitectura popular presenta cierta homogeneidad y responde al tipo usado por toda la comarca.
La Iglesia parroquial de la Asunción es del siglo XVIII, se edificó bajo la orden del abad de Montearagón, don Pedro Nolivos. Cuenta con tres naves divididas en cuatro tramos cubiertos por bóveda de lunetos en la central, y de lunetos en las laterales. En su interior se conserva un bonito retablo y custodia que durante 1858 experimentaron un proceso de decoración mandado por el abad Miguel Asín.